No vengas esta noche

 

No vengas esta noche, no vengas que hay tormenta.
Hay barro en el camino, no avanza la carreta.
La luna se ha escondido, no quiere que la mire
¡La luna es como un beso de un pájaro que vuela!
 
Los perros tienen miedo, hay culto a los fantasmas.
Un rayo abre una puerta, presagio de que vienes.
Mi voz en el silencio, en cruz pide a la suerte
que se abran los caminos, hasta llegar a verte.
 
Espérame mañana, espérame en la huerta,
Espérame temprano que habrá una luna nueva.
Encenderemos velas, vendrás con tu guitarra
y cantaras mis versos a la flor del ciruelo.
 
Cultivaré mis sueños,  plantaré claveles.
Los pintaré de rojo e iré piedra por piedra
hasta llegar al alma de la higuera en el monte,
para vencer el miedo de pronunciar tú nombre.
 
Seremos lo que somos, tierra, sangre, cenizas,
un  baile, una canción y un puñado de flores.
No vengas esta noche, no vengas que hay tormenta.
Hay barro en el camino, no avanza la carreta.

© Edmée Cobo Giancáspero