Ay vida, tú me debes otra vida
Por todos los encuentros atrasados
Por todas las esperas en suspenso
Por todos esos versos mal trazados
Mi sangre tiene rojo y es poema
Por todo ese tiempo bajo cero
Por todo ese amor no cosechado
Por todas las repuestas apuradas
Mi tiempo sigue oculto tras la nada
Por todos los rincones en silencio
Por toda esa hierba sin rocío
Por toda esa ausencia faz al río
Navego entre fantasmas y es delirio
Por todos los otoños que se han ido
Por todas las hojas que han caído
Por ese sol que vuelve siempre al nido
La tierra nunca entiende del olvido
Por todas esas noches sin almohada
Por todas las promesas embargadas
Por todos mis silencios ahogados
Mi canto tiene cuerdas fracturadas
Por todas esas puertas bien cerradas
Por todos los candados que he encontrado
Por todos los recuerdos mal sellados
Mi norte mira al sur y está nublado
Por todos esos años sin verano
Por todas las arrugas que me has dado
Por todos los proyectos no logrados
Ay vida, tú me debes otra vida
© Edmée Cobo Giancáspero
Registro de Propiedad Intelectual
Inscripción N° 235.638
del Poemario "Rompiendo los Silencios"
En Santiago de Chile
Registro de Propiedad Intelectual
Inscripción N° 235.638
del Poemario "Rompiendo los Silencios"
En Santiago de Chile
© Edmée Cobo Giancáspero
Registro de propiedad intelectual
Código: 1007166835728
Buenisimo trabajo. Intensidad y sentimiento de ese que llega hasta el hueso.
ResponderBorrar'Mi sangre tiene rojo y es poema'.
Un saludo.
Criticas de Copiloto Inteligencia Artificial
ResponderBorrarEl poema “Ay vida, tú me debes otra vida” de Edmée Cobo Giancaspero es una obra cargada de emociones y reflexiones profundas sobre la vida y sus desafíos. Aquí tienes algunas críticas y análisis sobre el poema:
Temática y Emoción: El poema explora temas universales como el paso del tiempo, el amor no correspondido, y las oportunidades perdidas. La repetición de “Por todos” al inicio de cada estrofa enfatiza la acumulación de experiencias y sentimientos no resueltos, creando una sensación de deuda emocional con la vida.
Lenguaje y Estilo: Edmée utiliza un lenguaje rico y evocador, lleno de imágenes poéticas que transmiten una profunda melancolía y resignación. Frases como “Mi sangre tiene rojo y es poema” y “Navego entre fantasmas y es delirio” muestran su habilidad para combinar lo tangible con lo abstracto, creando una atmósfera de introspección y reflexión.
Estructura y Ritmo: La estructura del poema, con estrofas de cuatro versos y un ritmo constante, refuerza la sensación de repetición y monotonía en la vida del hablante. Esta elección estilística ayuda a transmitir la idea de que las experiencias negativas y las decepciones se acumulan de manera incesante.
Simbolismo: El uso de símbolos como “otoños que se han ido”, “hojas que han caído” y “puertas bien cerradas” sugiere el paso del tiempo y las oportunidades perdidas. Estos símbolos naturales y cotidianos hacen que el poema sea accesible y resonante para el lector, permitiendo una conexión emocional más profunda.
Tono y Voz: El tono del poema es de lamento y resignación, pero también de una cierta aceptación de la realidad. La voz poética parece estar en un diálogo con la vida misma, reclamando lo que siente que le ha sido arrebatado o negado.
En resumen, “Ay vida, tú me debes otra vida” es un poema que invita a la reflexión sobre las experiencias vividas y las emociones no resueltas. La habilidad de Edmée Cobo Giancaspero para capturar estos sentimientos en un lenguaje poético y evocador es lo que hace que su obra sea tan impactante y memorable